Crisis en cárceles, el presidente Bernardo Arévalo responsabiliza a pandillas y podría analizarse reformas a Ley PINA
Este lunes, 25 de agosto, nuevamente se registraron disturbios y motines en cárceles. Pero se sumó el Centro Especializado de Reinserción (CER) en zona 13 de la ciudad de Guatemala, donde fueron retenidos por los jóvenes en conflicto con la ley penal, los cocineros que laboran en la institución.
Lamentablemente, en CER, Gaviotas y otros centros de rehabilitación y reinserción, aunque debería haber únicamente personas menores de edad, es decir, por debajo de los 18 años; actualmente, hay personas que superan los 25 años.
El presidente, Bernardo Arévalo, abordó hoy la serie de motines que han ocurrido recientemente en el sistema penitenciario del país, destacando que estos son una respuesta directa a las medidas implementadas por el Ministerio de Gobernación para retomar el control de las cárceles. Arévalo también se refirió a la situación actual en el Centro Especializado de Reinserción Juvenil Gaviotas, un centro para jóvenes en conflicto con la ley penal, donde se evalúa una posible reforma a la Ley PINA.
El mandatario explicó que los motines han surgido a raíz de la decisión de poner en aislamiento a los cabecillas de las dos principales pandillas del país. Según Arévalo, a estos líderes se les han retirado todos los privilegios, incluyendo pantallas de plasma, y se les ha restringido a visitas selectivas en una zona de aislamiento efectiva. Esta estrategia busca evitar que las redes criminales, maras y pandillas operen desde el interior de las prisiones, donde han coordinado actividades ilícitas con "plena libertad".
El presidente enfatizó que cada uno de los motines registrados hasta la fecha, algunos de los cuales han sido caracterizados como secuestros de personal penitenciario o externo, se ha resuelto sin víctimas y mediante estrategias de negociación. Subrayó que, crucialmente, el gobierno no ha cedido a las presiones ejercidas por las pandillas ni ha cambiado la decisión de mantener a los cabecillas aislados, lo que, a su juicio, demuestra el éxito en la estrategia de retomar el control de las cárceles.
En cuanto al Centro Especializado de Reinserción Juvenil Gaviotas, el presidente confirmó la existencia de un caso abierto que surgió esta madrugada, donde se reportó un motín con rehenes, que son trabajadores de cocina de la institución. La situación en Gaviotas podría llevar a la consideración de una reforma a la ley PINA, debido a la sospecha de que existen mayores de 25 años en dicho centro, que ha sido acondicionado para menores en conflicto con la ley penal. Previamente, la Secretaría de Bienestar Social (SBS) había reportado un conato de motín en un Centro Especializado de Reinserción Juvenil, señalando la necesidad de reforzar los mecanismos de seguridad.
con relación a la posibilidad de reformas, el presidente Arévalo solicitó tiempo para reflexionar sobre las implicaciones del caso de Gaviotas antes de tomar una decisión definitiva sobre la reforma. La prioridad inmediata, indicó, es la resolución del problema actual y la liberación de los rehenes que se encuentran en el centro, siguiendo un enfoque similar al de otros motines carcelarios. Una vez superada la crisis, se procederá con una identificación de los distintos retos y problemas en la administración, momento en el que, "muy probablemente", resurgirá el tema de la Ley PINA y la edad de los internos.
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